El duelo de pistolas fue un deporte olímpico ¿Lo sabías?
Esta disciplina apareció en las ediciones de 1906 y 1912 y consistía en disparar a maniquíes con una diana en la garganta desde una distancia de 20 a 30 metros.
En unos juegos de Sydney el 32% de la población voto a favor de que volviera este deporte.
Los enfrentamientos a pistola eran una visión moderna de la esgrima y ésta ya se había incluido en los Juegos Olímpicos celebrados hasta el momento por iniciativa del propio Coubertin, que era esgrimista.
Las normas de Villiers no cambiaban sustancialmente el desarrollo de los duelos tradicionales, salvo que se sustituyen las balas de plomo por bolas de cera, que los contendientes dispararon a la señal del árbitro.
Ahora bien, el COI consideró que esa imagen podría resultar demasiado fuerte para los Juegos Olímpicos y en lugar de dispararse entre sí, los tiradores lo hacían sobre blancos neutros o maniquíes.
Hubo un gran avance, teniendo en cuenta que en París hubo una prueba de tiro sobre aves vivas al vuelo que supuso la muerte de tres centenares de palomas.
En 1908, Londres acogió la IV edición de los JJOO y volvió a ser una disciplina presente, aunque como deporte de demostración, es decir, esas modalidades que el COI incluye de vez en cuando, en parte para fomentarlas y en parte para homenajear al país organizador cuando es en él donde se practican especialmente.